En nuestro anterior artículo, comentamos algunas de las causas por las que se puede producir el mal aliento con el fin de tratar de evitarlo. Hoy, completando aquél, queremos proponeros algunas soluciones o remedios contra la halitosis que podemos seguir tranquilamente en nuestras casas.
Como es lógico, lo primero que tenemos que poner en práctica es el mejorar nuestros hábitos de higiene cepillándonos dientes, encías y lengua después de cada comida sin olvidar el uso del hilo dental. Es necesario, también, visitar a nuestro dentista de MPDental con regularidad para prevenir cualquier tipo de afecciones dentales como las caries o eliminar el sarro.
A continuación, os ofrecemos una serie de consejos caseros con los que mantendremos a raya los problemas de mal aliento.
Si, por cualquier motivo, no tienes la posibilidad de cepillarte los dientes tras la comida, enjuágate la boca con agua y masca un chicle sin azúcar.
Después de cada comida y durante unos minutos, mastica un trozo de limón sin pelar la cáscara.
Lleva siempre encima caramelos de menta sin azúcar y toma uno de vez en cuando.
Entre comidas, aprovecha para tomar una manzana o una zanahoria. Además de ser sanas para nuestro organismo, al no permanecer mucho tiempo sin ingerir alimentos, mejorará nuestro aliento.
Hierve durante 10 minutos algunas hojas de hierbabuena con las que preparar una infusión y tómala después de comer. También son válidas la manzanilla, el hinojo, el poleo o el anís.
Otra opción similar consiste en poner a hervir ramas de perejil con dos o tres clavos de olor enteros. Revuelve la mezcla mientras se está enfriando, cuélala y usa el líquido resultante para enjuagarte la boca varias veces al día.
Muchas otras hierbas, además del perejil, contienen propiedades aromáticas: menta, eucalipto, tomillo o romero dan buen resultado si hacemos infusiones con ellas o bien mascamos directamente algunas hojas.
Si detectamos que el mal aliento se debe a problemas digestivos, podemos emplear semillas de cardamomo masticándolas lentamente después de la comida. Con este acto limpiamos la boca y eliminamos el mal olor de otros alimentos aunque, eso sí, debemos de tener en cuenta que su sabor es bastante fuerte.
Además de lo expuesto sobre estas líneas, en MPDental recomendamos evitar el tabaco, no beber alcohol y limitar el consumo de alimentos como el ajo y la cebolla, siendo estos los principales factores de riesgo evitables.